jueves, 22 de diciembre de 2011

Viviendo los Últimos Tiempos 3

¿Qué le pasó a Adam? Se le tumbó toda la estructura, antes estaba en un estado perfecto, un ambiente perfecto.

5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal. Génesis 3:5

Le convence de que ahora, directamente ya va a ser como Dios; le dice: "¿quién es tu padre?". Éso es lo que está ocurriendo hoy, el espíritu del anticristo ya está funcionando, tumbando estructuras de autoridad, perdiendo posición de poder y autoridad; por eso se atacan esas posiciones, para que un país se debilite. Un país se debilita, debilitando las posiciones; los Ministros no tienen poder, los Generales no tienen poder, se perdió esa autoridad por el mal testimonio, se perdió autoridad en la familia, porque si un padre anda jorobando por ahí, su señora no se sujeta bajo su autoridad; lógicamente, los hijos van a entender eso, se van a revelar contra el padre, se va a perder la autoridad, y ése es el espíritu del anticristo, rompiendo la unción que hay para que fluya el orden perfecto, donde el poder de Dios pueda fluir; se va cerrando como una arteria, y cuando se cierra se va  contaminando, y lógicamente, no fluye la sangre que da la vida, por lo cual, se va perdiendo esa vida dentro de la estructura de tu hogar. En una empresa, tú eres el gerente, tú eres el Presidente, y empiezan a decir: "no, él no sabe"; y eso ocurrió muchas veces con gente que habló mal de nosotros, los pastores decían: "no, el pastor no sabe, nada más se le ocurrió". Quiero decirte, que siempre yo supe, y con todo lo que hemos hecho, sabemos exactamente dónde nos estamos yendo; pero dicen: “no, es una ocurrencia del pastor; él dice esto porque piensa nada más”, ése es el espíritu del anticristo, y está operando en esas personas que minaron los corazones de la gente, porque quieren esa posición de autoridad, quieren ser iguales, quieren ocupar ese lugar.

¿Qué le pasó a Satanás? "Yo voy a poner mi trono al lado de Dios", pero no es así. Dios quería compartir todo Su poder, Dios quería entregar todo Su Espíritu, Dios nos iba a dar en Cristo todo.

Dice: “sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.”, es cierto, Dios conoce el bien y el mal, pero en ese momento, Adam y Eva no estaban preparados para conocer el bien y el mal, porque tenían que hacer ese proceso, igual que Jesús; a los 12 años Jesús se puso a predicar la Palabra, Jesús empezó a dar un discurso poderoso, habló e impresionó a todo el mundo. Pero el problema es que todavía tenía que aprender una cosa, la obediencia; éso dice en el libro de Hebreos, que Jesús aprendió la obediencia. Entonces vino, y para que Dios pueda cumplir Su propósito, Jesús dejó de hacer lo que estaba haciendo, se fue, se sujetó a María y a José, y entendió que tenía un momento en Su vida, para cumplir todo lo que Dios había planeado para Él, llegó a Su objetivo; pero ellos no, Adam y Eva no eran bebés espirituales, ellos tenían que ser un proceso, para que algún día sus sentidos no les gobiernen a ellos. Los sentidos fueron engañados; por eso dice Pablo:

3 Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo.
2 Corintios 11:3

 Los sentidos nos engañan. Hoy en día los sentidos ¿Cómo me pueden engañar a mí? Cuando viene algo, toma mi vida, y empieza a destruir mi vida, por ejemplo una enfermedad, la Biblia dice que ése es el mal; el bien es lo que Cristo hizo por mí. Conozco el bien, entonces peleo contra el mal, en el nombre de Jesús.
Pero había un compromiso de parte de Dios, que mientras crecían Adam y Eva, Él les iba a cubrir para que algún día, ellos también puedan discernir el bien y el mal.

Eso está en Génesis 3:22

22 Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre.
Génesis 3:22

Pero Adam y Eva no tenían la capacidad para discernir correctamente, eran constantemente engañados por los sentidos; eran como Dios, pero no alcanzaron la madurez, eran bebés, andaban desnudos, estaban en un estado de inocencia; pero de la inocencia tenían que pasar a conciencia, y conciencia es cuando uno ve su desnudez, entiende y se cubre, y ahora ya tiene la conciencia; pero la conciencia, elige la santidad, que es el bien, escoge la Palabra de Dios, y viven sin ser gobernados por sus sentidos, sino que tienen la autoridad para gobernar sobre sus sentidos.

En la iglesia ocurre lo mismo, cuando viene la gente nueva, le llevamos a la escuela de formación bíblica, para que vayan saliendo servidores. ¿Para qué están los pastores, maestros, apóstoles, evangelistas? A fin de que todos lleguemos, a la unidad de la medida de la estatura de Cristo, ése es su verdadero propósito, para que no seamos niños fluctuantes, los niños fluctúan.

Ahora, qué pasó? Adam y Eva ya sabían. Dice: “ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre.”, el árbol de la vida no estaba prohibido para ellos, mientras ellos comían del árbol de la vida, la vida eterna seguía todo el tiempo; ése es el programa natural de vida eterna de Dios para la tierra. Ahora, la Iglesia ya no va a vivir en ese programa, sino que la iglesia, tiene cuerpo glorificado; tú ya no vas a tener que estar comiendo del árbol de la vida, porque tú vas a recibir un cuerpo glorificado, dice la Biblia, vamos a llegar a éso, no te apures.

No hay comentarios:

Publicar un comentario